Macroeconomía: Mercado de Trabajo y Cifras del Empleo
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ColumnMacroeconomía: Mercado de Trabajo y Cifras del Empleo Por Alejandro Pastrana Valls
La macroeconomía estudia la economía en su conjunto, analiza el comportamiento de los mercados y las interrelaciones existentes. En este sentido, los mercados más importantes son: mercado de bienes y servicios, mercado de dinero y mercado de trabajo. Para esta investigación, se estudiará el mercado de trabajo. Éste tiene como prioridad analizar la relación de oferta y demanda de esta actividad a partir de la evaluación de las necesidades de los habitantes de trabajar (oferta) y de los intereses de las empresas en contratar (demanda).En la macroeconomía, las variables más importantes son: el empleo, la inflación (variación de los niveles de precios), la tasa de interés y el Producto Interno Bruto (PIB). En la actualidad, los Bancos Centrales (Banco de México para el caso de nuestro país) son autónomos; estos regulan la política monetaria (mercado de dinero). Por lo tanto, la competencia del gobierno se centra en influir en la economía a través de los impuestos y gasto público (finanzas públicas y balanza de pagos equilibradas) con el fin de promover un crecimiento continuo de la economía (incremento en el PIB), reducir los niveles de desempleo y una estabilidad en el nivel de precios.
El salario es el precio que se paga por las labores realizadas y está determinado en el mercado de trabajo, estipulándose en un contrato. Las teorías económicas alrededor del mercado del trabajo y el empleo fueron desarrolladas por Adam Smith, David Ricardo, Marx y Keynes. El salario está vinculado a la cantidad de ingreso que tienen los individuos para consumir (un componente del PIB). A mayor nivel de consumo mayor es el PIB de la nación.
Niveles altos de desempleo generan problemas tanto económicos como sociales. La presencia de un bajo nivel de empleo implica el mal uso de los recursos. Las dificultades económicas generadas por el desempleo afectan directamente la vida familiar y las emociones de la población sin trabajo. Los problemas se incrementan y la gente busca alternativas laborales, en condiciones adversas, para generar recursos económicos.
Para hacer un análisis más profundo del nivel de empleo y desempleo se deben considerar que hay varias vertientes. El desempleo se divide en: abierto, iniciador, cíclico, estructural, friccional y estacional.
El desempleo abierto se refiere a las personas que no trabajaron durante la semana de referencia; sin embargo, buscaron activamente empleo. En otras palabras, realizaron acciones para obtenerlo y estaban dispuestas para trabajar inmediatamente. El desempleado iniciador son aquellos que están esperando noticias del trabajo que esperan obtener. Por su parte, el desempleado cíclico ocurre en un tiempo determinado, sus consecuencias en países con un marco institucional débil puede genera desobediencia civil. El desempleo estructural corresponde a un desajuste entre la oferta y demanda de trabajadores. En cambio, el friccional es aquel que está desempleado temporalmente para buscar una mejor opción laboral. Por último, el desempleo estacional está vinculado a las fluctuaciones estacionales en la oferta y demanda de trabajo (por ejemplo, el sector agrícola; tiempos de cosecha y el sector de la construcción).
Los niveles de empleo (o desempleo) se describen en las cifras del empleo, las cuales son publicadas, cada quince días, por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS, institución que otorga servicios médicos y prestaciones a los trabajadores de las empresas del sector privado).
Las cifras del empleo son fundamentales para determinar cuál es la situación de la economía nacional ya que, el trabajo genera valor agregado y es fuente de progreso y riqueza económica que necesita la nación. La mejora en la calidad del empleo y las actividades realizadas favorecen al desarrollo económico. El incremento de la demanda de trabajo tiene como objetivo aumentar los niveles de empleo y también, las utilidades de las empresas.
El problema de las cifras del empleo es el mal uso por la lectura equivocada que pueden tener. Por ejemplo, a principios del mes de Agosto, el gobierno federal señaló un crecimiento económico muy importante, lo cual generó más de 559 mil empleos acumulados durante el 2010. Esta cifra ha sido cuestionada por varios actores políticos y además sugiere errores en su medición. Es imperante, que las autoridades y los servidores públicos conozcan el alcance de los indicadores y las consecuencias de su mal uso. La macroeconomía como área de estudio de la ciencia social debe ser analizada e interpretada de manera profesional. El fin de los indicadores, depende, en el fondo que se quiera alcanzar.
Comentarios: alejandro@pastranavalls.com
Last Update: Dec. 9, 2024, 11:21 p.m.